Un espeluznante hallazgo
hizo la tarde de este domingo una visitante del cementerio de Toledo, dentro de
la capilla del lugar. En una caja de cartón sobre una de las bancas encontró
muerto un bebé con pocas horas de nacido.
La Policía investiga lo
ocurrido en este municipio de Norte de Santander.
Las informaciones
preliminares del suceso indican que la residente llamó al padre de la iglesia,
a quien le señaló que encima de la caja consiguió un papel con una nota, al
parecer escrita por la madre del recién nacido, en la que solicitaba le dieran
sepultura al neonato.
El jerarca eclesiástico
llamó a las autoridades y al médico de turno del hospital, para que levantaran
el cuerpo e iniciaran las averiguaciones del caso.
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