Cinco disparos alertaron que un homicidio se había registrado en el barrio Manuela Beltrán. Sin embargo, la oscuridad que arropaba el sector, el martes a las 7:30 de la noche, mantuvo a los vecinos inquietos y encerrados en sus casas. Tan solo pasados unos minutos de las detonaciones, el lamento de una mujer confirmó el homicidio de Carlos Enrique Sayago Ortiz, de 33 años.
Las muestras de dolor provenían de la compañera sentimental del occiso, quien había salido a comprar la cena y al regresar encontró a su pareja tirada en el patio de su casa en medio de una mancha de sangre.
¿Qué sucedió? Nadie, a esa hora, se atrevió a entregar declaraciones. Los inquilinos de las cinco viviendas más cercanas dijeron haberse mantenido observando televisión.
El análisis de la escena del crimen deja entrever que el pistolero habría ingresado a la casa saltando una pared que conduce al patio, donde quedó el cadáver. La otra posibilidad es que la puerta principal quedó a medio cerrar, lo que para algunos investigadores es menos probable.
“La víctima al parecer se encontraba en la sala y al escuchar ruidos salió al patio a mirar lo que sucedía. En ese momento le pusieron el arma y le dispararon a quemarropa”, se aventuraron a considerar allegados al caso.
El agresor habría escapado a pie, por lo menos hasta cierto punto del sector, lo que se infiere por la dificultad en el acceso de motos y carros sobre las destapadas vías.
Vecinos manifestaron haber visto, cerca del sitio del crimen, una camioneta negra con vidrios oscuros, versión que por ahora no está ligada al agresor.
Sayago Ortiz era vendedor ambulante. Vivía en Manuela Beltrán desde hace al menos un año. Sus parientes dijeron que no sabían si tenía amenazas, lo único que “escuchamos es que unas personas habían llegado a monopolizar el sector donde vendía sus productos”.
El comandante del Segundo Distrito de la Policía Metropolitana de Cúcuta, teniente Brainer Mantilla, sostuvo que el occiso tenía antecedentes judiciales por hurto y que se avanza en las investigaciones para esclarecer el homicidio.
Agradecimientos a La Opinión
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