En el barrio Escobal una imprudencia lo condujo a la muerte

El motociclista venezolano, de 54 años, falleció tras sufrir un accidente de tránsito en El Escobal, frente a las oficinas de la Dian, a pocos metros del puente internacional Francisco de Paula Santander, que comunica con Ureña, en el vecino país.

El comerciante Édgar Germán García Pineda murió el jueves en la mañana en un lugar con poca posibilidad de que se registre un mortal choque. El bajo nivel de accidentalidad se debe a que los conductores deben reducir la velocidad para, primero, pasar un reductor de velocidad y, segundo, porque hay presencia de las autoridades aduaneras.

Testigos sostuvieron que García Pineda, quien se movilizaba en una Bera Socialista, perdió la vida tras cometer una imprudencia. Al parecer, intentó adelantar un tractocamión de carga pesada por el espacio que tenía entre el carro y el separador de la concurrida vía, sobre el carril que conduce a Venezuela.

“El motorizado quiso pasar el carro por la parte izquierda, pegado al separador. No sé por qué golpeó el andén y perdió el control de la moto. Una parte de su cuerpo cayó debajo del carro”, relató un transeúnte, quien se abstuvo de precisar su nombre.

El declarante añadió que el conductor del carro, sin darse cuenta de que el motociclista estaba en el piso, arrancó y lo lesionó con las ruedas.

Esta versión es analizada por las autoridades judiciales, que también investigan si el conductor del vehículo tuvo algún tipo de responsabilidad.

Parientes de la víctima mortal aseguraron que a las 7 de la mañana del jueves se movilizó hacia Cúcuta para comprar unos productos que no conseguía en su país y que luego iba a comercializar en su venta de abarrotes.

“No entendemos qué pasó. Cuando llegamos ya se lo estaban llevando para un centro médico. Jamás había tenido accidentes. Era muy prudente. Tenía sus papeles al día”, manifestó su compañera sentimental.

De La Opinión para Sucesos