José
Miguel Demoya Hernández, alias Chirimoya, y quien es señalado por las
autoridades de ser uno de los jefes de la banda criminal conocida como el Clan
Úsuga, antiguos Urabeños, fue capturado ayer en desarrollo de una importante
operación policíal, según informó el Departamento de Policía de Córdoba.
Por Chirimoya, quien supuestamente delinquía en Córdoba y en el Bajo Cauca antioqueño, las autoridades ofrecían hasta 50 millones de pesos de recompensa.
En el 2012, Demoya Hernández había sido capturado por las autoridades, pero logró quedar en libertad al poco tiempo.
En ese entonces, las autoridades le señalaron, al igual que hoy, de ser uno de los jefes de la banda criminal denominada como Los Urabeños, con un claro poder delictivo en el departamento de Córdoba.
En el 2012, Chirimoya también había sido capturado por la Policía en un allanamiento en el corregimiento El Cedro, en Ayapel, señalado de participar en el asesinato de más de 15 personas en la región.
En su momento, al hoy detenido se le señaló de ser el autor del crimen del exalcalde de la Apartada y exdiputado de Córdoba, Jorge Chejne Martínez, así como del asesinato de la profesora de Ayapel, Lucy Flores Ricardo.
De igual forma se le sindicó de ser el autor del crimen de Bernardo Vallejo, cuñado de Chejne, quien fue asesinado en febrero de 2013 en un potrero de su finca del corregimiento Tierradentro por negarse a prestar unos caballos a miembros de Los Urabeños.
El exalcalde Chejne Martínez fue asesinado en una finca de propiedad de su esposa en la cual se encontraba descansando y se dijo inicialmente que fue por negarse a pagar unas vacunas.
A Chirimoya lo investigan además por el crimen de tres personas en la finca Río de Janeiro, zona rural de Puerto Libertador, para vengar la muerte de ‘Lucho Culo’, uno de los jefes de la banda.
Por Chirimoya, quien supuestamente delinquía en Córdoba y en el Bajo Cauca antioqueño, las autoridades ofrecían hasta 50 millones de pesos de recompensa.
En el 2012, Demoya Hernández había sido capturado por las autoridades, pero logró quedar en libertad al poco tiempo.
En ese entonces, las autoridades le señalaron, al igual que hoy, de ser uno de los jefes de la banda criminal denominada como Los Urabeños, con un claro poder delictivo en el departamento de Córdoba.
En el 2012, Chirimoya también había sido capturado por la Policía en un allanamiento en el corregimiento El Cedro, en Ayapel, señalado de participar en el asesinato de más de 15 personas en la región.
En su momento, al hoy detenido se le señaló de ser el autor del crimen del exalcalde de la Apartada y exdiputado de Córdoba, Jorge Chejne Martínez, así como del asesinato de la profesora de Ayapel, Lucy Flores Ricardo.
De igual forma se le sindicó de ser el autor del crimen de Bernardo Vallejo, cuñado de Chejne, quien fue asesinado en febrero de 2013 en un potrero de su finca del corregimiento Tierradentro por negarse a prestar unos caballos a miembros de Los Urabeños.
El exalcalde Chejne Martínez fue asesinado en una finca de propiedad de su esposa en la cual se encontraba descansando y se dijo inicialmente que fue por negarse a pagar unas vacunas.
A Chirimoya lo investigan además por el crimen de tres personas en la finca Río de Janeiro, zona rural de Puerto Libertador, para vengar la muerte de ‘Lucho Culo’, uno de los jefes de la banda.
Libre por vencimiento de términos
En el 2012, Chirimoya había quedado en libertad luego de que un juez se la concediera por vencimiento de términos.
En su momento, la libertad de Chirimoya había causado indignación en el entonces comandante de la Policía en Córdoba, coronel Jaime Ávila, dado el extenso prontuario de quien ayer, una vez más, volvió a ser detenido.
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