La calle 12 del barrio
Fredonia quedó manchada con la sangre de Obed de Jesús Matosa Castellón, de 18
años, quien pagó los platos rotos de un problema entre dos niños, uno de ellos
su hermano menor. Fue asesinado de un balazo.
Obed era mototaxista y el segundo de cuatro hermanos. Vivía en la calle 16 de Fredonia, pero frecuentaba mucho la 12 pues allá vive su abuela materna.
El problema empezó cuando el hermano de Obed, de 12 años, fue señalado por una vecina de tocarle las partes íntimas a un menor de 4.
Con esta información, el padre del niño fue a reclamar a los parientes del menor de 12 años.
“Obed estaba en la casa y se armó una discusión entre él y el papá de ese niño. Discutieron y todos se amenazaron. Las mamás de los dos niños empezaron a hablar y dijeron que iban a arreglar todo a las buenas y que iban a llevarlos a un sicólogo para ver qué había pasado en verdad”, relató un pariente de Obed.
Pero las cosas no quedaron así. Al llegar la noche, Obed estaba en una esquina, a unos pasos de la casa de su abuela, cuando llegó el papá del niño, supuestamente abusado, en compañía de un familiar, con quienes volvió a discutir.
Presuntamente, el padre del menor sacó un arma y le disparó a Obed apenas lo vio, pero no acertó. El papá de Obed, que estaba cerca, se abalanzó sobre el agresor y le tumbó el arma.
“Ahí fue que el otro familiar del niño recogió la pistola y le disparó varias veces a Obed, pero solo le dio un balazo en el abdomen porque él corrió”, explicó una hermana.
El agresor escapó, mientras que a Matosa Castellón lo llevaron al Hospital Universitario del Caribe. Allí llegó muerto.
La familia del difunto pide justicia, mientras que sus agresores huyen.
Obed era mototaxista y el segundo de cuatro hermanos. Vivía en la calle 16 de Fredonia, pero frecuentaba mucho la 12 pues allá vive su abuela materna.
El problema empezó cuando el hermano de Obed, de 12 años, fue señalado por una vecina de tocarle las partes íntimas a un menor de 4.
Con esta información, el padre del niño fue a reclamar a los parientes del menor de 12 años.
“Obed estaba en la casa y se armó una discusión entre él y el papá de ese niño. Discutieron y todos se amenazaron. Las mamás de los dos niños empezaron a hablar y dijeron que iban a arreglar todo a las buenas y que iban a llevarlos a un sicólogo para ver qué había pasado en verdad”, relató un pariente de Obed.
Pero las cosas no quedaron así. Al llegar la noche, Obed estaba en una esquina, a unos pasos de la casa de su abuela, cuando llegó el papá del niño, supuestamente abusado, en compañía de un familiar, con quienes volvió a discutir.
Presuntamente, el padre del menor sacó un arma y le disparó a Obed apenas lo vio, pero no acertó. El papá de Obed, que estaba cerca, se abalanzó sobre el agresor y le tumbó el arma.
“Ahí fue que el otro familiar del niño recogió la pistola y le disparó varias veces a Obed, pero solo le dio un balazo en el abdomen porque él corrió”, explicó una hermana.
El agresor escapó, mientras que a Matosa Castellón lo llevaron al Hospital Universitario del Caribe. Allí llegó muerto.
La familia del difunto pide justicia, mientras que sus agresores huyen.
De La O para sucesos
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