La migración de
trabajadoras sexuales de Venezuela está generando una disputa a muerte por el
territorio con las prostitutas colombianas. En menos de 18 días se han
registrado dos triples femicidios en el departamento de Magdalena, Colombia.
Según fuentes policiales,
el pasado 29 de diciembre ocurrió el primer hallazgo de tres cuerpos de féminas
sin vida y con impactos de bala en la cabeza, en la orilla del río Manzanares,
en un sector del barrio Garagoa de Santa Marta. El otro trío de asesinatos se
registró este lunes en la ciénaga de Chilloa, en el sector El Banco.
A pesar de que los dos
casos sucedieron en fechas diferentes, las autoridades de la Policía Nacional
colombiana relacionan las muertes de las seis mujeres con una vendetta de
oficio entre prostitutas venezolanas y colombianas.
En el primer caso, las
víctimas fueron Karen Noriega e Idanis González, oriundas de Barranquilla,
mientras que la tercera se llamaba Andrea Torrado, de Bucaramanga. Cabe
resaltar que Idanis residía en Venezuela y tenía pocos días de haber llegado al
Caribe colombiano, debido a la crisis que enfrenta el país.
En esa oportunidad, el tío
de Idanis, Eurys Charris, reveló que Andrea “se dedicaba a la prostitución y
tuvo problemas grandes con unas personas que tomaron venganza contra ella, y
las asesinaron a las tres porque estaban juntas”.
Con respecto al otro
hecho, hasta el momento no han sido identificadas las infortunadas, pero se
conoció que las tres mujeres presentaron signos de torturas antes de ser
degolladas con una arma blanca.
La nota publicada por el
diario El Heraldo describe que “las víctimas tenían piedras amarradas en sus
pies, tal vez con la intención de que no salieran a flote”.
Norma Vera, defensora de
Derechos Humanos de la Mujer en la región, informó que “en El Banco ya se había
reportado, y había una amenaza previa, precisamente porque ha habido agresiones
y más de 20 mujeres se habían acuchillado entre ellas por conflictos territoriales
en el marco de las actividades de prostitución”.
Vera solicitó que se
declare el departamento de Magdalena en alerta por violencia de género, debido
a que estos asesinatos obedecen a “un conflicto que va desde la presencia de
actores criminales hasta problemas migratorios. Es un tema humanitario que debe
ser analizado por las autoridades migratorias y judiciales”.
El acalde del Viejo
Puerto, Víctor Rangel López, solicitó investigar estos hechos e indicó que las
mujeres asesinadas presuntamente no son de la zona.
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