“Gabriel Hernando Cuartas Giraldo actuó
dolosamente porque tenía conocimiento de los hechos constitutivos, de las
infracciones penales y quiso su realización. Es decir, hizo parte de Los
Rastrojos, donde portaba armas y conservaba marihuana en su casa (…) Tal y como
lo aceptó al declararse culpable de los cargos imputados por la Fiscalía”,
señala un aparte de la sentencia que lo condenó a 8 años y 2 meses de prisión.
Cuartas Giraldo, conocido como El Gabo,
fue detenido el 7 de junio de 2014 en una vivienda ubicada en la urbanización
Arkamar Campestre, donde la autoridades encontraron un revólver, dos pistolas y
28 cartuchos para las mismas, además de 200 gramos de marihuana y dos cuadernos
donde consignaban cuentas.
Los uniformados también hallaron documentos como
carnés y pasaportes, un folio de matrícula inmobiliaria, facturas, fotocopias
de cédulas venezolanas, cédulas de
extranjería de ciudadanos chinos, un radio de comunicación y un Ipad.
Para entonces, el coronel Necton Borja, comandante operativo de la
Policía Metropolitana de Cúcuta, señaló al detenido como jefe financiero de Los
Rastrojos.
“Se trata de alias El Gabo, un sujeto al
que se le hizo un allanamiento cuando vivía por la Avenida del Río, y en el
cual se hallaron armas y pólvora. Desde entonces, se le había iniciado una
investigación que daba cuenta de que estuvo viviendo en El Bosque y por último
había llegado, hace tres o cuatro meses, a la urbanización Arkamar Campestre,
antigua vía Boconó”, dijo el oficial.
Cuartas Giraldo fue presentado ante el
Juzgado Segundo Penal Municipal que legalizó su captura y le impuso medida de
aseguramiento en prisión.
“Era un sujeto que vivía solo, salía a
diferentes horas del día, llegaban en carros a visitarlo, se desplazaba por
diferentes sectores para no ser detectado; era el comportamiento normal de un
delincuente y eso llamó la atención de la comunidad. Tenía el cargo de
financiero y era el encargado de aportar la logística a todos sus grupos de
sicarios y delincuentes para que ejecutaran las órdenes de los jefes”, añadió
para entonces el coronel Borja.
La Fiscalía le imputó los delitos de
concierto para delinquir agravado, porte ilegal de armas y tráfico, fabricación
o porte de estupefacientes.
Preacuerdo
En vista del contundente material
probatorio en su contra, sumado a la captura en flagrancia, El Gabo llegó a un
preacuerdo con la Fiscalía que consistió en aceptar su responsabilidad a cambio
de una rebaja del 12.5 por ciento en la pena.
Un juzgado especializado de Cúcuta
aceptó dicho preacuerdo y lo sentenció sin beneficios de casa por cárcel o
suspensión condicional de la ejecución de la pena.
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