Luis Carlos Acuña
Carrillo, detenido por la Policía Metropolitana de Cúcuta en una redada contra
el 'Clan Úsuga', en junio de 2014, aceptó los cargos y fue condenado a 6 años
de prisión, tras recibir una rebaja del 50% en la pena.
Acuña Carrillo hizo parte
de un grupo de 28 capturados, señalados por la Policía de pertenecer a dicha
organización delincuencial dedicada a cometer homicidios y extorsiones y que
sería liderada desde la cárcel por Geovanny Darío Fuentes, apodado 'El Divino'.
Tras su detención, Acuña
Carrillo fue presentado ante el Juzgado Noveno Penal Municipal, con función de
control de garantías ambulante, que legalizó la captura y le impuso medida de
aseguramiento en prisión, mientras avanzaba el proceso en su contra. La
Fiscalía le imputó los delitos de concierto para delinquir agravado y uso de
menores en la comisión de delitos.
Las detenciones iniciaron
con la interceptación de varias líneas telefónicas (debido a un incremento de
las extorsiones), entre ellas una que El Divino tenía en la cárcel y desde
donde indicaba a quién se debía asesinar o extorsionar, además de cómo debía
ser el movimiento de la droga, las armas y el cobro de ‘vacunas’ a los
contrabandistas.
“Precisamente, por el
reacomodamiento que estos criminales estaban haciendo en su estructura fue que
los homicidios se nos dispararon por estos días”, señaló entonces el coronel
Gonzalo Carrero, comandante de la Policía Metropolitana.
Una vez los investigadores
tuvieron identificados a cada uno de los presuntos criminales, iniciaron sus
ubicaciones y fueron hasta cada uno de los sectores donde residían y hacían
reuniones, descubriendo que el Cerro de la Cruz, parte alta de Sevilla, era el
centro de operaciones.
Preacuerdo
En vista del contundente
material probatorio en su contra, que incluyó las interceptaciones telefónicas,
reconocimientos fotográficos y entrevistas a compañeros de ilicitud, Acuña
Carrillo decidió llegar a un preacuerdo con la Fiscalía.
De 10 años de condena que
le correspondía por el uso de menores en la comisión de delitos, sumado a 2
años por concierto para delinquir, la pena se redujo a la mitad tras aceptar su
responsabilidad y acogerse a sentencia anticipada. De ir a un juicio y ser
hallado culpable el procesado no obtendría ningún beneficio.
Acuña Carrillo, de 33
años, natural de Codazzi (Cesar), no recibió beneficios de casa por cárcel, ni
suspensión condicional de la ejecución de la pena. Los demás procesados
enfrentan procesos por separado.
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