1. Que aparezca James
Si a James lo anulan,
Colombia sufre un cortocircuito. No hay quien asuma ese papel protagónico, ese
rol de fútbol y liderazgo. Así pasó frente a Venezuela. El 10 colombiano se vio
sometido por el rival, perdió presencia, desapareció, y no hubo quien le diera
una mano. Ahora puede ser diferente. Brasil seguramente va a querer dominar, se
va a preocupar por atacar, va a dejar espacios. Es el partido para que James
invente, para que organice, para que asista. Debe encontrar sus propios
espacios. Luego, que brille, como sabe.
2. El juego de los
laterales, vital
Durante la pasada Copa
Mundial, una de las virtudes de Colombia fue el buen juego de sus laterales, de
Camilo Zúñiga y de Pablo Armero. Pero en el debut en la Copa América, frente a
Venezuela, ambos estuvieron en bajo nivel. No generaron las oportunidades
ofensivas que el equipo necesitaba como apoyo para penetrar la férrea defensa
rival. Recuperar ese juego por las bandas será una prioridad hoy, pero teniendo
en cuenta que el de en frente es Brasil. El regreso a zona defensiva y taponar
la salida rival serán clave.
3. Jugar para Falcao
La gran diferencia de esta
Selección con la del pasado Mundial, es que ahora está Falcao García. Por lo
tanto, Colombia ha intentado jugar para proporcionarle posibilidades al
delantero. En el pasado juego, Bacca fue su compañero de ataque. Por momentos,
retrocedió para arrancar de atrás y darle más espacios a Falcao, pero a este la
pelota nunca le llegó. Este miércoles, contra un rival tan fuerte, con
defensores recios, Colombia debe insistir en buscar y dejar mano a mano al
‘Tigre’.
4. Orden y concentración
Este es uno de esos
partidos en los que Colombia no puede ni parpadear. Cualquier descuido, una
marca que se suelta, una desconcentración, y fijo Brasil le cobra. El orden no
solo debe ser individual, debe ser colectivo y táctico. Que el equipo esté aplicado
y con las líneas muy cortas entre ellas. En lo anímico, también será un partido
aparte. A Colombia no le puede pesar la presión que ejerce el rival. Debe creer
que puede vencerlo, que tiene las armas para hacerle daño. Y la que le quede,
meterla.
5. Anular a Neymar y
cuidar el medio
Sería ilógico no tener
ciertas prioridades con Neymar, el crac brasileño, por eso el buen trabajo de
los volantes de marca será fundamental, para encimarlo, presionarlo,
estorbarlo, hacerle relevos para no dejarlo pensar ni reaccionar, ya que se
sabe que en una baldosa puede escapar. Colombia debe imponer condiciones en el
mediocampo, pero no caer en el error de sufrir una tarjeta amarilla que
condicione a sus volantes. No pueden caer en la provocación que logra Neymar
con su habilidad.
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