Los 'azucareros' quedaron a un paso de la
clasificación. Los naranjas quedaron eliminados.
Los caleños no
pudieron con Envigado en casa y están a la espera del cierre de la jornada para
ratificar su clasificación a la semifinal con 28 puntos. No estuvo iluminado el
equipo ni el estadio, al que le fallaron sus luminarias en el segundo tiempo y
el partido debió ser finalizado por el árbitro.
Los primeros
movimientos no eran precisos, Deportivo Cali estuvo apurado por abrir el
marcador y no conectó bien a sus jugadores de la mitad para adelante. Mientras,
Envigado fue prudente con la pelota y cuidó cada paso, evitando dejar espacios
en el fondo. No arriesgó.
Miguel Murillo
fue el más peligroso de los atacantes locales, primero probó de media distancia
con latigazo cruzado y Jefferson Martínez (12 PT) contuvo seguro. Minutos
después, se repitió el duelo pero por los aires, de nuevo Castillo ahogó el
grito de gol ante un cabezazo peligroso de Murillo.
El juego se
mantuvo con el marcador en cero por la actuación del cuida palos Martínez,
quien se hizo figura atajada tras atajada. Con reacción, desvió al tiro de
esquina un potente derechazo de Yerson Candelo (28 PT). Luego, en dos tiempos,
controló un lanzamiento libre de Murillo (38 PT).
Envigado no
había podido pisar el área rival y los minutos finales de la parte inicial los
aguantó en campo propio. Los 'naranjas' procuraron atacar la espalda de los
caleños sin mayor peligro.
Fallas en las
luminarias del Pascual Guerrero impedían que el partido lograra su curso, en el
minuto diez de la parte complementaria las luces del sector oriental se
apagaron y el juego debió ser detenido varios minutos por el central.
El partido
pareció perder la chispa de la parte inicial, a Envigado no le interesó atacar
y mantuvo su bloque defensivo sólido. Esperó en su terreno, especuló. Cali, por
su parte, adelantó líneas pero careció de profundidad, Miguel Caneo volvió a
desaparecer y Yerson Candelo cargó con el peso de las ideas.
Fue el propio
Candelo que hizo levantar a los hinchas de sus puestos, gambeta larga que dejó
en el suelo al lateral y en carrera centró al corazón del área. Sergio Herrera
(34 ST) definió de volea y la pelota se fue lejos.
Los minutos de
cierre fueron eternos, de nuevo la iluminación del lado oriental flaqueó y el
referí volvió a detener el juego. Los ánimos se habían venido abajo y los
futbolistas lucían desorientados. Luego de dimes y diretes en la mitad del
campo y casi veinte minutos después, el juez dio por finalizado el encuentro.
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