viernes, 18 de septiembre de 2015

En la frontera implementarán venta de productos por terminal de cédula

En los diferentes  abastos y supermercados de los municipios fronterizos se  implementará  la venta de productos regulados según el terminal de cédula de identidad de la persona, para evitar el  “bachaqueo” y permitir que los artículos de la cesta  básica lleguen a mayor cantidad de  consumidores.

Aunque ya algunos comercios de San Antonio han implementado esta medida de manera  temporal   y en otros diariamente, el general Carlos Martínez, autoridad única de la Zona de Seguridad Fronteriza I,  afirmó que se están haciendo reuniones y planificando para  implementar este mecanismo de control en todos los abastos y supermercados ubicados en los municipios limítrofes.

“Ya estamos  definiendo, se han realizado reuniones con dueños de abastos y supermercado para determinar  cuál es la mejor  política que vamos a utilizar  para facilitar que los productos lleguen a la mayor cantidad de personas. Igualmente,  con los consejos comunales hemos determinado una serie de abastos y bodegas que ya tienen su código Sunagro, a fin de que los productos no solo lleguen a los automercados grandes, sino diversificar  la  distribución  para que los  productos  lleguen a distintos establecimientos y así evitar las colas”.

El general Martínez ratificó que en San Antonio y Ureña se implementará la  venta de productos  regulados por número de cédula.  “Estamos tratando de simplificar los procesos  para que los  ‘bachaqueros’ no aprovechen la situación”.

En algunos supermercados  y abastos de San Antonio se ha  implementado este mecanismo, en algunos  casos  todos  los días de la semana, y en otros solo cuando  los comercios  reciben productos  regulados. En los comercios donde el mecanismo  ha sido  temporal,   ha sido implementado de manera  tal que la persona  que compra en un abasto  no pueda adquirir el mismo  producto en otro establecimiento, el mismo día.


A pesar de estas medidas  y el control que tratan de imponer los militares,  los establecimientos de San Antonio, que reciben  productos  regulados normalmente, siguen estando abarrotados  de compradores,  quienes pasan la noche  y gran parte del día  haciendo cola  en las puertas de los establecimientos para comprar  productos  alimenticios, artículos de limpieza, aseo  personal y pañales.

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