Juan Ignacio Moncada Díaz,
de 36 años, no entregó el viernes en la
noche el taxi que conducía entre semana y fue denunciado por abuso de confianza
por el dueño del vehículo de transporte público.
Lo que parecía un simple
abuso de un empleado con su patrón terminó convirtiéndose en una tragedia,
luego de que el taxi fuese hallado el sábado en la calle 7, del centro de
Cúcuta, y el cuerpo sin vida de Moncada en una trocha de la vereda Santa
Cecilia, en la vía que de Cúcuta conduce al corregimiento de San Faustino.
Según el informe policial,
el cuerpo fue hallado el sábado a las 7
de la mañana por unos pimpineros en el sector Brisas del Quindío; de inmediato,
informaron a la Policía sobre el macabro hallazgo. Sin embargo, el levantamiento
del cadáver solo se realizó hasta las 9:20 de la noche.
“Bajé a orinar y me
encontré el cadáver. Estaba boca abajo y tenía un billete de 10 mil en la mano
derecha”, dijo uno de los testigos.
El cuerpo estaba a unos
pocos metros del río Pamplonita y muy cerca de la carretera,
La víctima vestía bluyín,
zapatos deportivos y franela blanca; su color de piel era blanco, tenía
contextura gruesa y llevaba corte militar; al parecer, fue asesinado de dos disparos en la cabeza.
Según testigos, el viernes
en la noche se escucharon disparos en esta zona, por lo que se presume que el
cuerpo sin vida llevaba por lo menos un día abandonado en la trocha.
El coronel Yecid Arango,
comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc), dijo que el cadáver
ingresó como N.N. a Medicina Legal, pues no tenía consigo ningún tipo de
identificación; ayer, sin embargo, fue identificado por sus familiares. Moncada
no tenía antecedentes penales.
“En la zona donde fue
encontrado hay varias trochas por donde pasan gasolina ilegal; ya hemos
iniciado con las investigaciones para esclarecer este crimen”, indicó el
coronel.
Hallan un N.N kilómetros
más abajo
El crimen del taxista
Moncada no fue el único registrado en esta zona de Cúcuta. Otro cuerpo, hallado
en la finca La Palestina de la vereda Llano Seco, corregimiento Guaramito,
llamó la atención de las autoridades y los vecinos de este sector.
El cadáver hallado el
sábado en la noche a orillas del río Pamplonita presentaba, según testigos, una
abertura en forma de cruz desde el pecho hasta la región púbica. Además, tenía
otras heridas en la cabeza y el cuello.
La víctima, que al cierre
de esta edición seguía sin ser identificada, tenía aproximadamente 30 años y
1.70 metros de estatura; además, tenía ortodoncia, estaba desnudo y solo vestía
calcetines.
El levantamiento del
cuerpo fue realizado ayer en la mañana por la Seccional de Investigación
Criminal (Sijín) y el cuerpo fue trasladado a Medicina Legal para la
correspondiente identificación.
Según vecinos de la vereda
Santa Cecilia, en San Faustino, el cadáver del N.N. habría sido visto cerca de
donde se encontró el cuerpo sin vida del taxista el sábado en la mañana y luego
habría sido arrastrado por el río hasta Guaramito.
El coronel Arango no
descartó que ambos crímenes tengan algún tipo de conexión, por lo que las
investigaciones buscarán determinar si hay relación alguna entre los dos
hechos.
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