En cumplimiento a la
política de seguridad ciudadana del Gobierno Nacional, la Policía Metropolitana
de Cúcuta (MECUC) diseñó un dispositivo especial de seguridad para brindar
acompañamiento en el tradicional ‘Día de los niños’.
Para garantizar que la
tradicional celebración de dulces y disfraces a realizarse del próximo sábado
31 de Octubre, se desarrolle dentro de los protocolos de seguridad y prevención
requeridos, la Policía Metropolitana de Cúcuta ha dispuesto de un dispositivo
integral de vigilancia y una jornada de prevención denominada ‘Vive un día
lleno de dulzura ¡Disfrázate de paz y alegría!’.
La seguridad en las
calles, centros comerciales y sitios de afluencia de visitantes, desde las
primeras horas del día y la noche estará a cargo de al menos quinientos
uniformados de vigilancia, el Grupo de Protección a la Infancia y Adolescencia
(GINAD), la Seccional de Tránsito y Transporte (SETRA) y del Grupo de Acción
Unificada para la Libertad Personal (GAULA).
En esta festividad de
‘Halloween’ es importante que los padres de familia, cuidadores y acompañantes,
estén muy atentos de los niños y niñas, para evitar que se presenten casos de
emergencias con los disfraces que puedan representar algún tipo de riesgo,
extravíos y por el consumo de dulces de dudosa procedencia, adulterados,
vencidos o en estado de descomposición.
La seguridad de los más
pequeños de la familia debe ser integral. Adicional a la vigilancia policial
brindada durante la participación en los eventos masivos, los adultos deben
tomar medidas de auto seguridad, entre ellas que los disfraces utilizados
tengan una identificación particular que permita diferenciarlos entre la
multitud, ya que habrán otros menores de edad con los mismos atuendos.
Se recomienda que adherida
al disfraz, los pequeños porten una etiqueta con el nombre, teléfono y
dirección para ubicar a sus padres en caso que se extravíen. En los recorridos
y visitas a sitios públicos, siempre deben estar acompañados. A los niños y
niñas, se les debe orientar como acudir de inmediato a un uniformado, quien los
cuidará hasta el momento de retornarlos a sus acudientes.
Los disfraces deben contar
con una correcta visualización, movilidad y respiración, evitando así que
presenten situaciones de accidentes que pueden resultar fatales; asimismo se
debe evitar que jueguen con fósforos, encendedores y/o velas, ya que los
disfraces suelen ser de materiales inflamables en algunos de los casos.
En cuanto el consumo de
dulces, se deben evitar las golosinas de dudosa procedencia, las que posean
envoltura imperfecta o que no tienen los datos básicos de información, como la
fecha de fabricación y vencimiento, la empresa fabricante y los
componentes.
También se tienen
diseñados planes especiales para hacer vigilancia en los cementerios y otros
sitios que puedan ser utilizados para llevar a cabo el sacrilegio de tumbas,
actos de satanismo y brujería, teniendo en cuenta que por estas fechas hay
personas que hacen alusión a otro tipo de eventos contrarios a lo que debe ser
este día, un espacio de alegría, compartir y fiesta.
